Los cambios de 'look' de Penélope Cruz

La actriz española ha deslumbrado con su último corte y color de pelo.  Repasamos los distintos estilos que ha lucido la artista. La aparición de Penélope Cruz el domingo durante la 29.º edición del Festival de Cine de Turín ha dejado a todos los que habían criticado el estilismo de la actriz desde que ha sido madre con la boca abierta. Vuelve la española a pisar fuerte gracias a su papel en el drama Venuto al Mondo y a su nuevo y favorecedor look. Una aparición que dejó al director, Sergio Castellito, y a su compañero de rodaje, Emilie Hirsch, en un segundo plano. Los fotógrafos lo tenían claro: sus flashes eran para ella. La actriz se ha cortado la melena y el flequillo y ha oscurecido su cabello. ¿El resultado?: más guapa y bastante más juvenil. Sombra aquí, sombra allá Pelo largo y moldeado a la moda de aquellos terroríficos –en cuanto a estética se refiere– años ochenta, en los que el pelo frito y el cardado eran lo más: así era la primera Penélope que conocimos, la del programa La quinta marcha. Después llegarían mejores tiempos y con ellos, mejores looks para la actriz. Ya cuando hizo el vídeo La fuerza del destino para Mecano y se ennovió con Nacho Cano, sus cejas habían sufrido una interesante y acertada definición y su pelo, con ese flequillo al que varias veces en su vida ha vuelto a recurrir, era mucho más favorecedor. Lo que ha hecho pocas veces la actriz ha sido llevar el pelo corto, y fue por exigencias del guión, para la película No te muevas (2004), con el mismo director con el que acaba de trabajar, Sergio Castellito. Mantuvo el corte algún tiempo, pero no ha vuelto a arriesgar tanto con su melena. Su pelo largo, abundante y casi siempre oscuro (aunque en los últimos tiempos había aclarado algo su tono), es de hecho una de sus señas de identidad. Donde no acertó Penélope fue en su peinado en la 58 edición del Festival de Cannes (2005), donde presentaba Chromophobia. El recogido que llevaba y con el que trataba de simular una melenita algo ñoña no favorecía a esta bella mujer a la que casi todo le sienta bien. Aunque, por otra parte, parece difícil que a alguien le haga algún bien este complicado peinado. El resto de sus cambios han sido más de peinado: o melena larga extralisa o ligeramente ondulada, aunque en alguna ocasión las ondas fueran ya rizos algo excesivos, como en la gala de los Oscar de 2006.

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